Es una de las mejores olas de Canarias y rompe sobre un reef volcánico de poca profundidad cerca de la costa. Es una máquina de fabricar tubos profundos y rápidos. Los vientos del este y sureste y el swell del oeste o norte son las mejores combinaciones. Aunque ese día creo que el viento estaba un poco cruzado aún así aguantaba bastante bien.
Viendo la foto parece una ola pequeña pues el punto de vista engaña mucho. Basta con ver la altura del rebote y a dónde lanza el labio para hacerse una idea de su potencia lo cual, unido al escaso fondo la convierte en una ola objetivamente peligrosa.
Al llegar no había nadie en el agua, la marea todavía estaba demasiado baja y para echarse ahí hay que echarle huevos, como Samuel, que se vino expresamente desde Tenerife para darse un baño en el Quemao.
La primera ola que bajó, como toma de contacto, fue ésta y ya se puede ver que no estaba tan pequeña como aparentaba.
La siguiente que bajó, ya de la serie y con un buen tamaño, fue la última (ese día, claro). Take Off...
Bottom Turn…
Y la ola, que estaba un poco cruzada de viento y no siempre aguantaba no le dio tiempo a subir y…
…le cerró en las narices, lo envolvió y envió al fondo. Cuestión de mala suerte.
Se llevó una buena leche, al tocar la roca.
Así que a esperar otro día, quizás con la marea algo más alta, pero estoy seguro que aunque fueron solamente dos olas, a él ya le valieron la pena.
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