sábado, 30 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO CINCUENTA

Hace unas semanas, tuvimos compañía en la ruta de senderismo.No le interesamos mucho porque se marchó enseguida.

viernes, 29 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO CUARENTA Y NUEVE

De momento, la ecuación que se cumple es:

Tarde de preboda = (algo x romanticismo) + (mucho x buen humor) 


miércoles, 27 de mayo de 2015

sábado, 16 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO TREINTA Y SEIS

Esta foto podría titularse "Llamaradas en Andrómeda" pero no, ese no es su título, y no lo es porque prefiero llamarla "Trozo de pan sobre servilleta roja mientras espero en el restaurante". Cosas del aire lucense.


viernes, 15 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO TREINTA Y CINCO

Este símbolo está a la entrada de un centro comercial. ¿Dirías que es masculino o femenino? Está claro que la percepción subliminal identifica los símbolos aparentemente neutros asignándoles una categoría que conocemos.


jueves, 14 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO TREINTA Y CUATRO

 De vuelta de Coruña, ya anocheciendo, del estreno de la obra de teatro basada en el libro En tu Línea, me encontré con una desagradable sorpresa. En el cruce de Casadas, al pasar Vimianzo, había en medio de la carretera un lobo recién atropellado que estaba intentando levantarse. Tan pronto pude di la vuelta, aparté el coche de la carretera y fue corriendo a ver si podía hacer algo.

 Lo arrastré con cuidado hacia fuera de la carretera, me llamó la atención que no había gesto agresivo alguno en su cara ante mi presencia, solo miedo e incomprensión por su incapacidad para levantarse. Llamé a un compañero para ver si podíamos llevarlo hasta su clínica para intentar estabilizarlo y poder enviarlo al centro de recuperación de fauna silvestre de Santa Cruz, porque debido al golpe con el coche, tenía un orificio en la pared costal, pero ya en el abdomen, por el que sobresalía una costilla rota. Cogí la cámara y mientras esperaba, hice la foto que puedes ver abajo.

 Entretanto llegó un guardia civil que había terminado su turno y que no dudó en pararse a ayudar. Sin embargo no fue posible hacer nada, porque posiblemente por una hemorragia interna, a los diez minutos entró en shock y al poco tiempo dejó de respirar. El agente avisó a la patrulla de guardia  y allí se quedaron ellos, cuando el lobo ya había muerto, hasta que llegaran a recogerlo y nosotros nos marchamos para casa. 

 El resto del viaje estuvo bañado por una sensación amarga al no haber podido hacer nada, pero también me ayudó a recordar por qué me hice veterinario: desde niño siempre me gustó llevar animales a casa: grillos, diferentes especies de ranas, arañas, hormigas (con su correspondiente hormiguero), palomas, culebras (de collar, de escalera,...), lagartos (ocelados y verdinegros)... entraron en mi casa y tuve por ello unos cuantos problemillas con mi madre en un principio y con la residencia de estudiantes en la que estaba cuando cursaba veterinaria a continuación, sobre todo el día que se nos escapó una víbora del terrario. 

 Después de 22 años de ejercicio profesional recién abandonados, me doy cuenta cómo disfrutaba cada vez que lograba sacar adelante a un animal y cómo me gustaba observar el comportamiento de otros cuando los tenía unos días en mi casa antes de devolverles la libertad y también me doy cuenta de lo lejos que todo ello está de la veterinaria de grandes animales, donde no hay lugar para la curiosidad o para la compasión. Es pura y dura economía, y si curar un animal cuesta más que sacrificarlo, casi en el 100% de las ocasiones se opta por esta opción. 

 Esta vez no pudo ser, pero en otras ocasiones sí es posible sacar adelante al animal enfermo o herido, y la sensación de alegría al haberlo conseguido supera con mucho a todas la veces en las que, como hoy, no hubo nada que hacer.

 


miércoles, 13 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO TREINTA Y TRES

Hoy, en una preboda, los novios nos llevaron a un lugar chulísimo. tiene un montón de rincones, con esa pátina que da la piedra con musgo y líquenes, con restos antiguos y zonas de sombra filtradas por la luz del sol. Fue un placer hacer el reportaje es un sitio como ese.


martes, 12 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO TREINTA Y DOS

Hoy estuve en As Pontes en la primera preboda de la semana y, además de pasar una tarde divertida con una pareja y su pequeño, cuando ya nos marchábamos no pude resistir la tentación de parar a fotografiar las máquinas que empleaban en la mina de carbón.
Es una pena que a su alrededor estuviese todo vallado, porque dan para pasar allí un día entero fotografiándolas. Además así evitaba que me tomasen por un chalado, subido al quitamiedos haciendo equilibrios o levantando el teleobjetivo con un monopié por encima de la valla. Pero en este país los que mandan son como Buzz Lightyear, les encanta vallar todo lo vallable hasta el infinito y más allá. 

miércoles, 6 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO VEINTISEIS

El punto de vista es muy importante en fotografía. Una foto como la de hoy, hecha por la tarde en lo que parece un paseo entre margaritas daría una imagen muy distinta si pudiese cambiar el punto de vista.

Porque donde yo estaba era en la cima del Peñafiel. Con la cámara en un trípode de bolsillo y disparando con el temporizador de 10 segundos para que me diese tiempo a sentarme en la piedra, pues como que no se aprecia el lugar ni la pose ortopédica resulta muy espontánea, pero puedo asegurar que el sitio es de los mejores que hay por aquí. 

domingo, 3 de mayo de 2015

viernes, 1 de mayo de 2015

3 6 5 CIENTO VEINTIUNO

Hoy por la mañana parecía un día más. 

A las siete y media de la mañana me levanté para atender un prolapso de útero, a la hora de comer salió un parto y poco antes de acabar el turno salieron dos avisos. 

Pero no, hoy no fue un día más, hoy fue el último día de 22 años con esta rutina. 

Hoy colgué las botas y ya no habrá más navidades por la carretera atendiendo vacas enfermas, ya no habrá noches en vela. Como tengo habilidad para meterme en berenjenales, estos sacrificios los sustituiré, seguro, por otros parecidos, porque en el fondo soy un masoca, pero de momento espero poder regular un poco mi vida con unos horarios normales.

Hoy por la mañana parecía un día más, pero no lo fue, y ahora, la suerte está echada.