Como mi rodilla sigue sin dar signos de recuperación, aprovecho la excusa de subir alguna ruta sencilla al blog para recordar las sensaciones que siempre me dio la montaña. No es fácil explicarlo, simplemente no hay nada que me llene como lo hace la montaña.
Esta ruta es de marzo del 2008. Es el monte al que subía con frecuencia para entrenar por ser el único con cierto desnivel que está al lado de casa. No cambié el texto de cuando la publiqué en Mendiak.net, por lo que hay algún anacronismo respecto a la actualidad. Espero que os guste.
A Moa
Altura: 627 m Desnivel: 622 m Desnivel Acumulado: 635 m
Distancia: 6 Km Duración: 3,5 horas Dificultad: Muy Fácil
Introducción
El macizo del Pindo está situado en la Costa da Morte. Desde Fisterra se observa muy bien toda la imponente mole mirando hacia el Este desde la carretera que lleva al faro.
Es una zona de alto valor arqueológico, con muchos petroglifos, aunque está totalmente olvidada. Hace unos días encontraron restos de cerámica de la Edad de Bronce en una cueva, totalmente a la vista, por parte de un grupo de espeleólogos. Cogieron los restos, de aproximadamente 4.000 años de antigüedad y los entregaron ellos mismos en el Museo Arqueológico de San Antón, en Coruña.
Mapas Orientativos
Descripción detallada:
La ruta comienza en el pueblo de O Pindo, en una de las pocas zonas que se salvaron de los incendios del 2006 en toda esta zona, por lo que los primeros pasos son en un entorno muy agradable.
La ruta va ascendiendo lentamente. Al principio la senda está muy bien delimitada. Es imposible perderse aunque se intente.
Pronto alcanzamos zonas quemadas, ya han pasado casi dos años y el monte bajo se va recuperando, pero los árboles tardarán muchos años. Al fondo, entre las ramas, ya se ve el cabo Fisterra.
Poco después ya distinguimos el cabo Fisterra con claridad.
En esta zona hay los restos de un castillo del siglo X, el Castelo de San Xurxo. Las peñas que se ven al fondo lo parecen, pero no lo son, del castillo solo quedan unas piedras amontonadas.
Haría falta una figura humana como referencia para darse cuenta del tamaño de estos bloques.
Durante la ascensión me voy encontrando con multitud de piedras que, buscando el ángulo adecuado, permiten reconocer cantidad de figuras.
A veces, el camino se pierde entre tantos bloques, pero es fácil seguir la zona más pisada.
Y en caso de duda, siempre aparece algún jito, en ocasiones, solo 1 ó 2 piedras colocadas sobre algún bloque.
El camino nunca se empina mucho. Más bien vas subiendo escaleras todo el tiempo.
Voy ganando altura. En el horizonte, el frente que entra hoy por la tarde y que me jode el finde. Aquí no hace falta el “hombre del tiempo”, basta asomarse a la ventana y ya ves lo que viene.
Las piedras forman cientos de figuras. Hay decenas de figura antropomorfas, sobre todo en otra zona del macizo, el Penafiel, donde hay que trepar para llegar arriba, con unas vistas impresionantes sobre el río Xallas, donde estaba la única desembocadura de un río europeo en el Atlántico en forma de cascada y que está cortada por un embalse. De todas formas, en años lluviosos, en invierno tienen que abrir las compuertas totalmente, y entonces el espectáculo es grandioso.
En ocasiones, el paisaje es caótico.
Aquí vemos un montón de piedras que bloquean el camino. La intención es que no pasen los caballos salvajes que abundan en la zona, aunque desde los incendios, suelen moverse por zonas que fueron más respetadas por el fuego.
Más piedras.
Non atopo o xeito de perdoar ó fillo de puta que prendiu lume (¿Se entiende, no?)
En este pequeño valle hay unos humedales en donde se extraía Wolframio. Todavía quedan resto de algunas instalaciones muy rudimentarias.
Vistas hacia el Norte. En las cuerdas de los montes adyacentes, cientos de molinos de viento.
La cámara es una compacta de 4 MB, con el zoom jodido, por lo que en casa pruebo a cambiar algo los encuadres, o crear alguna pano con el Photoshop.
Ya nos acercamos a la cumbre. Sólo quedan unos metros.
Pero sigo viendo piedras.
La cumbre es una mole inmensa de granito.
Mirando hacia el Oeste, vemos Fisterra.
Mirando hacia el Sur, la playa de Carnota, la más larga de Galicia, con 5 Km de arena de punta a punta.
Hasta la próxima
boas meu! moi chulas as entradas :)
ResponderEliminargustoume a do parto con temporal.. vai aventura.
A túa sudadera xa a teño lista.
Dime onde cha deixo ou como facemos para quedar :)
unha aperta!
Me recuerda un poco a Avión...
ResponderEliminarOK Rubén. Chámote mañán xoves.
ResponderEliminarSí Fernando, es parecido a Pena Corneira, aunque me parece que esto es en talla XXL y Pena Corneira, aunque tenga más altura, presenta unas dimensiones más modestas.
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